LAS TORRES KIO


   

 

 

LAS TORRES KIO (40º 28´02″N 3º41´20″W)

Un domingo, hace unos años, estaba haciendo zapping cuando veo que por el canal de la Televisión Española se estaba pasando la última etapa de la Vuelta de España de ciclismo y el pelotón transitaba por “El Paseo de la Castellana”, una amplia avenida que va del centro a la zona residencial del Norte de Madrid, muchos recuerdos vinieron a mi mente, pues hace muchos años, usufructuando una beca, tuve la oportunidad de vivir una temporada en la capital de España, y me quedé mirando como circulaban por esa avenida que hace tiempo supe disfrutarla.

De repente, en la pantalla, apareció algo que no podía creer, el pelotón pasaba entre dos enormes edificios de color negro, más inclinados que la Torre de Pisa, uno a cada lado del “Paseo de la Castellana” y además de una altura respetable.

Me quedé sorprendido, no solamente por la audacia del proyecto, sino que para realizarlo tuvieron que conseguir dos terrenos de considerable superficie, uno exactamente enfrente del otro en la zona residencial más cara de Madrid, donde el valor de la tierra es astronómico y no es fácil encontrarlos. Además, para hacerlos, tuvieron que convencer a la municipalidad, algo que es difícil en cualquier parte del mundo y seguramente mucho más en la burocrática y católica España[1], que aceptara, no uno, sino dos edificios que sin duda estaban fuera de las todas las ordenanzas y que además crearían un impacto visual significativo en la ciudad.

Por supuesto sentí curiosidad y me puse a investigar, los edificios se llaman “Las puertas de Europa” o más comúnmente las “Torres Kio” (Kuwait Investiments Office), por la empresa que la construyó, de origen kuwaití. Su construcción comenzó en mil novecientos ochenta y nueve, aunque debido a sucesivos paros en las obras por motivos económicos, no fueron terminadas hasta mil novecientos noventa y seis con la financiación de “Caja Madrid”, que ocupa actualmente una de las torres.

Como siempre sucede en casos como éste, las torres tienen sus fanáticos y detractores, fueron proyectadas por los arquitectos estadounidenses Philip Johnson y John Burgee, inspirado en un dibujo del artista soviético Alexander Rodchenko (1891-1956), uno de los principales exponentes de la vanguardia soviética de los años `30 (lamentablemente no pude encontrar el dibujo, así que si alguien lo conoce le agradezco que me lo haga llegar, de todas maneras durante la búsqueda encontré trabajos de artistas y arquitectos rusos de esa época, verdaderamente interesantes). Las torres tienen casi ciento quince metros de altura, dicen los que las han medido que una es un centímetro más alta que la otra, lo cual para la altura que tienen no es nada y su inclinación respecto de la vertical es de quince grados (la Torre de Pisa tiene un desvío de algo más de cuatro grados), de todas maneras fue un proyecto complejo porque los ascensores se mueven verticalmente y por lo tanto el vacío que dejan está ubicado en lugares diferentes en cada planta, o sea que todos los pisos tienen una diferente distribución, dicen que la vista de las oficinas al frente de la avenida es algo alucinante. Por otra parte como el “Paseo de la Castellana” va de Sur a Norte, las caras inclinadas están orientadas hacia el Este y el Oeste, con lo cual las caras externas, las que no dan sobre la avenida, son verdaderos colectores solares, así que algún problema de acondicionamiento térmico en el verano madrileño tendrán, o cuando menos le saldrá bastante caro, también hay quienes dicen que los pisos superiores tienen un movimiento que llega a impedir el trabajo en las oficinas del último piso.

El emprendimiento terminó, como era de esperar de un proyecto tan audaz en una capital donde es frecuente que se hagan chanchullos inmobiliarios, con los promotores de dicho emprendimiento, “los Albertos” o “los dos Albertos” como los denomina la prensa, con un juicio por estafa (no sé si ese es el término jurídico).

No sé cuanta culpa tendrán “los Albertos”, puede que sean estafadores o también puede que sean tipos a los que se les pueda comprar confiadamente un auto usado, pero lo que es cierto es que cuando se proyectan edificios o urbanizaciones que requieran que se les admitan tolerancias (o recalificaciones, término que usan en España) cuanto más grandes son esos proyectos, con o sin razón, siempre aparecen sombras de duda sobre la transparencia de los procedimientos. 


[1]  Esto es lo que pensaba en aquel momento, pero a la luz de todos los negociados inmobiliarios que se hicieron en España, parece que cuanto más grandes y descabellados son los proyectos, más posibilidades tienen de materializarse.

 

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2 Responses to “LAS TORRES KIO”

  1. Usted se equivoca con Alcocer y Cortina y comente un error demasiado extendido. Al contrario de lo que dice, yo presencié cómo en el Banco Zaragozano multiplicaron por seis su valor y compartieron hasta el ultimo céntimo con sus accionistas, sin incurrir en la práctica ayer y hoy tan extendida de cobrar prima por su mayoría. Igualmente, han contribuido como segundos accionistas de ACS a convertirlo en uno de los mayores grupos mundiales de construcción, infraestructuras y energía. Y en la empresa forestal y papelera ENCE han dado otro buen ejemplo de su buen hacer a largo plazo. Pero usted se equivoca con ellos por reproducir los tópicos, bulos o falsedades difundidos por varios especuladores a quienes hicieron ricos en URBANOR y luego intentaron sacarles más partido denunciandoles ante los tribunales. El resultado es que, después de mas de 10 años, han sido absueltos de esas acusaciones una vez por la Audiencia, otra por el Constitucional y dos veces mas por el Tribunal Supremo, que en una ocasión tambien fue inducido a error. Yo creo que los Albertos son tipos a quienes se puede comprar confiadamente un auto usado

  2. hola,
    Soy un estudiante de ingeniería de Nápoles. Tengo que hacer una tesis sobre las torres inclinadas y estaba mirando Torres Kio. ¿me podrían ayudar con los dibujos y la información estructural?
    Le saluda atentamente

    Orefice Vincenzo